Es curioso que nuestro club necesite generar al menos una puñetera noticia al día, en estos tiempos en los que «España ya no necesita al Madrid» (porque estamos muy pendientes del balonmano y de la caracaballo de Mireia Belmonte, porque después de Nadal no volveremos a ser unos segundones deltenis y, sobre todo, porque nos pirran el mermao de Messi y el humilde Iniesta, que tiene su nombre en mármol en la fachada de casa). Tenemos que ser noticia a diario, decía, y ayer lo fuimos por partida doble, con un fichaje -algo que siempre genera expectación- y con la revelación de que vendíamos niños a mafias asiáticas para hacerlos adictos al crack, o algo así (tampoco creáis que el espectador medio de los Manolos captó algo muy distinto).
La pulítica de comunicación del Madrit es errática, y nunca se sabe por dónde va a salir (excepto cuando se acusa a Floper de algo, que reaccionan a la velocidad de la luz), pero esta vez ha actuado con agilidad, sacando un comunicado de lo más detallado en el que se desglosan todos los fichajes de menores investigados por la FILFA. El texto parece incontestable y deja claro que todo está en orden. ¿Qué queda pues del «escándalo»? Poca cosa: un Barsa que asegura que «el profe le tiene manía», pero sin embargo no es así: mientras el Madrid hacía las cosas por derecho, ellos llevaban una chuleta al examen, pero ahora se quejan amargamente de que lo hacían por «un bien mayor». En otras palabras, que su mierda huele mejor y que las reglas no se les deben aplicar porque son «mescunclú». Pero les tocará, por una vez, joderse; es aquello de que no se puede engañar siempre a todo el mundo.
Sobre la política de fichar criajos talentosos, a mí me parece bien. De hecho, el motivo de la mediocridad de la cantera madridista seguramente sea que estaba totalmente sobrevalorada y desfasada, siguiendo un modelo con chavales principalmente de Madrid e hijos de ex-jugadores, sin ofrecer ningún aliciente especial a muchachos de otras latitudes para iniciar una incierta aventura lejos de su familia. Obviamente los cracks no se fabrican en serie (eso sólo lo hizo la Far$a dando el suero del supersoldado al enano), pero de momento seguro que sube la calidad media de los canteranos, y también nos surgirán más cracks. No sé si llegará un día en que nos nutramos principalmente de la cantera, pero para llegar a ello parece bueena idea traerse a los mejores de todos los continentes. Y los que no lleguen al primer equipo probablemente dejen un buen billetico.
Obviamente esto ha de hacerse con racionalidad y criterios éticos. Creo que lo que prohíbe la norma actual es ofrecer trabajos de pega a los padres de los niños para provocar un cambio de domicilio, y que sólo puedes fichar niños cuyos progenitores se hayan mudado por motivos genuinos. Bien está: tampoco es plan de descapitalizar las ligas de todo el mundo sólo para engordar aún más los campeonatos de mayor importancia. El Madrid está trayendo talentos jóvenes respetando las reglas, y también está dando ejemplo en su ratio de ingresos/sueldos y en los cumplimientos de sus pagos. Es curioso cómo tantos se obsesionan en señalarlo como un club poco recto, cuando muchos de sus competidores tienen múltiples vergüenzas que tapar en diversos ámbitos.