Rappol
El partido transcurrió como si el Madrid se hubiera cansado de jugar contra el Gerona esta temporada. Losari San, además, perseveró en esa suerte de vía crucis en el que se ha emperrado en meter al madridismo patrio con el tema de la resucitación del Morciégalo. De un modo u otro, es un ex-jugador ya que castiga reiterada y seguramente el desempeño táctico del grupo. La primera parte del siñor Vieira fue más o menos pasable, con algunas llegadas y algunos despistes. El segundo periodo, fue otra nueva hecatombe para el bulto sospechoso en el que se ha convertido el ex-jugador. Algún elemento de la curia madridista debería hacer entrar en razón al argentino. El Morciégalo no puede volver a jugar, simplemente.
Tampoco me gustó Gasensio, un tipo al que parece que el mojo le ha abandonado desde que dijo la gilipollez aquella del carro. No se lo cree uno viéndole salir de inicio, y creo que es porque él tampoco se lo cree. Así que después de vernos con un gol de ventaja por obra de la buena racha de Casemiro, lo cierto es que aburrimos a las ovejas por la banda negra, y manejamos el centro de campo con una solvencia hueca que en la segunda parte se convirtió en agujero negro, con una lectura bastante absurda del partido por parte del Santo Losari: los cambios fueron un despropósito.
Tuvo bastante trabajo Pijamita en la segunda parte, prolongando su idilio con los postes y transformándose en un amante de la sombra del larguero. Era un dolor ver cómo los gerundenses percutían en diagonal derecha-izquierda, para luego buscar el segundo, tercer y cuarto palo del siñor Vieira, con los centrales desbordados y haciendo murete con Pijamita como si estuviéramos en Munich achicando balones a principios de siglo. Después de mucho intentarlo, nos tuvimos que mamar un penal (que Pijamita no paró) y el tal Portu le hizo otro hijo al Morciégalo, que con lo que lleva este año tiene para llenar cuatro ranchos como el de David Koresh y pegarles fuego.
No hubo épica, ni pelética, ni pelinpamplética. No había centro del campo, Vinicius salió tarde (y un pelín chupeta) y el equipo enloqueció de pura frustración al ver con qué poco se puede tirar por la borda el buenísimo trabajo desarrollado en las últimas semanas. Esperamos, pues, que Losari haga un poco de penitencia y reconsidere algunas cosas
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Parece mentira pero esto tenía fans.
Sí, bueno, ¿no? Hay días en los que es mejor quedarse en la cama, leyendo el piriódico, viendo la tele o tomando dronjas. El caso es que no lo hicimos, y el burro catalán nos folló, metiéndonos su larga y tiesa tranca hasta los higadillos y corriéndose dentro, haciendo un Flanker invers. Sin duda un triste día para nuestra maltratada patria, donde antes no se ponía el sol.
Y ahora viene la pregunta: ¿Pur qué? ¿Pur qué? Pues no creo que haya un motivo que digas «¡¡coño, eso es!!» Yo lo más que puedo hacer es intentar simplificar todo porque soy un poco gañán: En tema fúrbol, parece claro que Lolari tiene un once que le funciona y que gana, jugando bien, mal o regular. Los problemas llegan cuando se cambia ese once, sobe todo tras jornada Chempions: el equipo B no ha dado la talla este año, y más bien habría que llamarlo equipo G de Gay. Luego está el «Proyecto Hombre» que Lolari está intentando realizar con McCelo, pero ya se ha visto que no puede ser y además es imposible. El pelos está sólo para revulsivo en las segundas partes.
El golpe moral recibido es grave, y ahora el principal trabajo de Lolari será recuperar anímicamente a los mastuerzos, aparte de no repetir errores de bulto. Pero ojo, si el Tractoria te remonta un 1-0 en el Pipas me parece que la responsabilidad es sobre todo de los jugadores. Al menos la cosa sirvió para que el capitán tractorés sacara la patita separatista, eso es bueno para que los más despistados sepan de qué va esta gente.
En basket, podría decirse que uno puede aprovechar que te remonten 19 puntos para corregir muchas cosas en lo defensivo, pero va a ser que no: tras casi diez años en el cluc, este es el Madrid de Lolaso y siempre ha sido así. Simplemente, hay días en que se va del partido. Ayer fue especialmente doloroso porque nos hicieron un «Yóryevich» (ganarnos un título en casa) y encima hubo gran escándalo arbitral al final: una cosa muy española, intentar rectificar un error previo. Obviamente la cacicada es bestial, pero el Madrí debería contar siempre con estos hándicaps (me he hartado de decirlo), en vez de ponerles todo a huevo.
¿Votar para irnos de la ACB? Obviamente no se va a hacer esa mongolada que le han colado a Azpitarte, porque sería un ridículo histórico. ¿Quieres irte de la Liga? Pues de puta madre, pero explica que lo haces porque es ultradeficitaria y tiene poco prestigio deportivo. También puedes mencionar a los árbitros, pero desde luego no convocar un «referéndum» con todo quisqui cabreado después de un mal arbitraje. ¡¡Además, podría ganar el «no» y el ridículo sería aún peor!!
¿Qué conclusión saco de todo lo de ayer? Que hay que votar a Boxsssssssss. Porque cuando Santi sea presidente, los sediciosos sabrán que no habrá una piedra bajo la que estén seguros, e incluso los álbitros serán más justos con el Madrí y le echarán menos rostro. Vosotros sabréis lo que hacéis con vuestra papeleta, pero yo tengo muy claro lo que conviene a la nación.