…Pedrito, xavito, messito, puyolito y Pepe.

Por Jarrosón el Guasón

A pesar de ser consciente de la desventaja futbolística y emocional con el FCB, me alegré mucho cuando vi que podría haber un eventual duelo a doble partido en la Copa del Rey. Quiero aclarar que *me da igual* que el Barcelona nos gane, pero no soporto que nos postremos ante ellos como un equipo sin alma ni identidad. Este duelo a doble partido contra este maravilloso conjunto, mártir de la modernidad (en el peor sentido del término) socialdemócrata sirve -ni más ni menos- que para recuperar el tiempo perdido que Mourinho y jugadores se dieron el lujo de despilfarrar en agosto y el 10D.

Por desgracia, y después de 8 partidos contra el FCB (4 derrotas, 3 empates, 1 victoria. Aunque técnicamente sean 4 derrotas y 4 empates), el rostro de Mourinho comienza a recordarnos el hedor que un divorciado alchólico desprende por las mañanas en las escaleras de su portal. Es más fácil mantener el nivel una o dos veces cada dos años, (Chelsea, Inter), que 6 veces al año, lógico. Evidentemente ganar al FCB no es tarea fácil, pero por suerte o por desgracia la lucha por el nuevo orden mundial es una batalla que no cesa.

FACTORES FUTBOLÍSTICOS

No me gusta el 4-2-3-1, no es mi sistema favorito y menos contra el Barcelona, un conjunto que superpuebla el medio campo y no sólo se apodera del balón, sino del ritmo y cronómetro del partido, y de la moral del contrario. Busquets, Alves, Xavi, Iniesta, Pedro, Messi… demasiados costaleros para dos medios paralelos y un 10 obligado a alternar series de 100 metros con milquis durante hora y media. Esto me lleva a Lass. Lass es el señuelo con el que Mourinho nos descubre que finalmente, y a pesar de las apariencias, no es un extraterrestre sino un ser humano capaz de tropezar dos veces (o más) en la misma piedra. Lass no sólo se pasó la pretemporada dando vueltas a un campo, sino que además forma parte de los 15 de confianza de Mourinho. Si es por descansar a Khedira, o porque dolorosamente no encuentra competencia en Sahin, Granero o Altintop, es algo que sólo podemos preguntarnos entre amigos, confidentes madridistas. Lo que no puede escapar a los ojos de Mou es su anarquía, su ansia de protagonismo, creerse mejor de lo que es. Por eso rinde «mejor» de lateral, porque se le rebana de cuajo medio campo y en mitad del océano, donde Khedira, brazada a brazada siempre llega a la orilla, Lass se hunde, y con el efecto de las olas que genera su hundimiento, ahoga a los demás.

FACTORES EMOCIONALES

La Roja, la puta Roja. Nuestros futbolistas y los suyos comparten un foco de interés común, que paradójicamente es la selección nacional. La dictadura emocional de los culandrones sobre nuestros jugadores es devastadora. Parece que los españoles jueguen con el freno puesto so pena de destrozar el ambiente de la puta Floja -la marca blanca de lo cool en el resto del país-  ante tipos que les han metido 5 y se lo han restregado en la puta cara, tipos que han fingido y han engañado y, en definitiva, tipos que les han ganado siempre. Puede que tengamos un excelente grupo de jugadores, lo que ni mucho menos los convierte en buenos competidores. Lo que daríamos por ver al Madrid de Capello, en conjunto y generalizando, mejores competidores que jugadores: Illgner, Panucci, Hierro, Alkorta, Roberto Carlos, Redondo, Seedorf, Raúl, Mijatovic… contra este ejército de izquierdas -pero ejército- moralizante, condescendiente y pedante hasta la náusea.

Exceptuando a Arbeloa, la pusilanimidad que desprende el combinado de nacionales es aterradora. A Casillas sólo le falta pedir perdon cada vez que damos una patada (oh wait…), Xabi Alonso es un excelente jugador y un gran profesional que pasa por el Club sin ninguna vinculación emocional con el madridismo. Albiol está sobrepasado en cualquier plano y en caulquier eje, Granero no existe, a Sergio Ramos le falta cabeza y carisma para ser un tercio de lo que era Hierro en el campo, etc.

…Jarroson viendo jugar a Lass.

EL FACTOR MOURINHO

A medio camino entre lo futbolístico y lo emocional, José Mourinho no deshoja la margarita contra el Barcelona. Brillante en su planteamiento cuatrotresista el año pasado contra el Barcelona (Una victoria y una derrota que debemos contextualizar) fue la vez que el Madrid más cerca estuvo de competir contra ellos (cierto, Mourinho derrotó con el Inter al Barcelona usando el celebrado 4-2-3-1, pero de nuevo con un equipo competidor). En verano se empeñó en volver a jugar contra el BCN en la modalidad favorita de los culandrones (Xavi: «espero que el Madrid nos juegue de tú a tú«). No se sabe si por que cree en ello o porque se vio afectado por los bocachanclas del lumpen peridístico español y ese estúpido dogma que vincula la victoria a la belleza, pero no a una belleza épica -por ejemplo- sino a una belleza lírica por necesidad. Puede disculpársele el atrevimiento de la Supercopa, porque las bicicletas son para el verano, pero cuál fue mi sorpresa (nuestra sorpresa), que en el puto Día D hora H de la temporada, el 10 de diciembre de 2011, con la posibilidad de poner al Barcelona a 9 puntos en enero, Mourinho sorprendió a propios y extraños con la peor combinación posible de ideas desde que está en el Madrid (4-2-3-1 + Lass) vs FCB. Si no metí 100€ al Barcelona es porque me pesa el madridismo, pero el resto es historia. En el minuto 30 no tenía ganas de seguir viendo el partido, y estaba seguro de la victoria culandrona. El Madrid se deshizo ante la parsimoniosa virtud rival. Nunca un jugador del Barcelona observó el devenir de un partido desde tan alto.

¿CÓMO SE PUEDE LUCHAR CONTRA LA HIDRA DE BARCE-LERNA?

– Hombres indiscutibles: Pepe, Marcelo, Khedira, Di María, Benzema. Esta es la columna vertebral futbolístico-emocional sobre la que debe sustentarse el equipo. Me encantaría incluir a Casillas en la ecuación, pero las dudas que ofrece como líder sumadas a otros factores le dejan fuera.

-Pepe. Lo más parecido a un «die-hard competitor» en nuestra línea defensiva. En el medio o atrás, pieza indispensable por intensidad (debe estar bien calibrada).

– Marcelo. Tristemente infrautilizado el 10D, podría ser un problema combinado con Cristiano o Di María para cualquier engranaje defensivo del planeta. Si, como el 10D, Mou quiere intensidad defensiva y que su lateral suba dos veces en 90′, el titular debería ser Coentrao. Subiendo y actuando de falso interior o en asociación con Di María o Cristiano en zonas más exteriores, lastraría a Alves e involucraría a otro jugador rival en tareas defensivas.

-Khedira. Su suplencia el 10D en favor de Lass fue una broma macabra. Khedira no es el mejor del mundo en su puesto, pero es un activo indiscutible en este equipo. Su partido de Copa y posterior ausencia en Champions son un buen ejemplo práctico. La lesión sufrida en Copa lo deja fuera de la ecuación esta vez.

-Di María. Polifacético jugador que va, viene, sube, baja, presiona, asiste, recupera y trabaja. En uno de los tres puestos de arriba hace ganar un efectivo más en la fase defensiva.

-Benzema. Actualmente, nuestro mejor futbolista. Listo, inteligente, participativo, asociativo, recuperador y goleador.

– 4-3-3 en fase ofensiva, 4-5-1 en fase defensiva. Apertura-cierre del campo. Cristiano en la derecha, Di María en la izquierda, correcta utilización de Marcelo (si tienes el privilegio de contar con Marcelo, úsalo, si no, para eso has fichado a Coentrao).

Variables:

CAS – ARB PEP RAM MAR – KHE ALO SAH – DIM BEN CR (versión soft)

CAS – ARB PEP RAM MAR – KHE ALO COE – DIM BEN CR (versión atlética -)

CAS – RAM PEP CAR COE – KHE ALO LAS – DIM HIG CR (versión atlética +)

CAS – ARB CAR RAM MAR – KHE ALO PEP -CR BEN DIM (versión anal sex)

Otros nombres:

– Özil, por voluntad propia, se cae de cualquier once inicial. Irritante bajón de rendimiento en temporada 2011-12. Falta de fuelle físico. Utilidad en minutos finales (lo que fue en Bernabéu Liga o lo que iba a ser Kaka en Bernabéu Champions).

– El tercer hombre. Nos encantaría poder contar con Sahin o Granero y así equipararnos más al Barsa en «su» terreno, pero uno por problemas físicos y otro no se sabe por qué, no están disponibles. Lástima.

– Cristiano vs Di María. A Mourinho (y al propio jugador) les gusta Cristiano por la izquierda. Sin embargo, en apenas un partido de los ocho jugados el portugués ha sido determinante. ¿Por qué no probar a Cristiano por la derecha y a Di María por la izquierda para resquebrajar el acordeón azulgrana? ¿Por qué no Cristiano de punta con Benze por detrás, Di María por la derecha y Coentrao/Marcelo por la izquierda?

-Actitud de los totems del vestuario. ¿De verdad hace falta incidir en esto? Por desgracia sí.

El actual momento de forma del equipo me recuerda al de inicio de año. Por eso relativizo, y además supongo que estos picos de forma estén planeados en temporadas tan largas, o simplemente sean inevitables con chapuzas de república bananera como el parón de tres semanas de Navidades. En cualquier caso, hay dos datos inapelables hasta la fecha. Uno, que arrastramos un complejo de varios factores con el Barcelona. Y dos, el Real Madrid es lo más grande gracias a jugadores, entrenadores y dirigentes ganadores y poco pusilánimes. Que cada uno escoja la actitud que más le convenga.
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Por Geodotto, pretoriano fansista

…Sapiencia futbolística al estilo pipero.

El lunes pasado nos desayunamos (más bien almorzamos) con una rabiosa entrada en el blog de Miguel Ángel Hernández, en la cual trataba de hacer una descripción de parte de la afición madridista, justo la parte que más intensamente critica los comportamientos de los llamados «piperos», sector de la afición al que denominó «pijameros». Tú (usted, si es Custer o tiene batín), lector asiduo de este blog, seguramente oirías algo de la breve onda expansiva que esto tuvo en las «redes sociales», y de la reacción de los madridistas que sintiéndose aludidos, lejos de despreciar el término, se invistieron con él orgullosamente.

En la descripción de los «pijameros» se podía encontrar una retahíla de estereotipos (con bulletpoints y todo), con objeto de que resultara lo más exagerada posible. Sin embargo, difícilmente alguien de los denominados pijameros puede reclamar la posesión de todos los atributos con que el autor les describe. Por otro lado, el termino«pipero», tan brillantemente acuñado, sí que posee características que se pueden encontrar en no pocos socios que acuden al estadio cada fin de semana. A saber: idolatría de Raúl, añoranza de Guti, xenofobia (el jugador español siempre es superior a cualquiera que venga de fuera), defensa de un actitud de «señorío» ante las injusticias, retraimiento (por decirlo de alguna manera) a la hora de animar al equipo en elcampo, etc. Incluso más de uno de los comentaristas que escriben aquí afirma que familiares o amigos suyos son paradigmas de este perfil.

Aunque las generalizaciones ayudan a entender ciertos términos, usándolas se pierden los detalles, y en este caso los detalles son determinantes. Si miramos con lupa a un «pijamero» o a un «pipero», podemos encontrar detalles de uno en el otro. Como en un ying-yang, en el lado negro siempre hay una parte de blanco, y viceversa. Son conductas, creencias, opiniones e incluso dogmas, que jamás pensaríamos profesaran. Yo siempre he dicho que tengo un pequeño pipero dentro de mí, que hace que, por ejemplo, se me caliente la sangre con los ataques estáticos del equipo, temo al inmovilisimo, igual que Carme Chacón (bueno, ella dijo literalmente lo contrario, aunque quisiera decir lo mismo que yo, pero ni ella ni los que la escuchaban se dieran cuenta; es lo malo de aprenderse consignas de memoria). También soy mal«pijamero» pero de los malos, ya que no tengo PlayStation ni me gasto mi dinero en juegos en vez de en entradas de anfiteatro. Por otro lado, me han contado de ciertos «piperos» que no tienen ningún reparo en ponerse a cantar y animar al equipo en los momentos difíciles, aunque esto sea mucho más difícil de ver.

Por lo tanto, lo que es necesario criticar son los comportamientos y no las personas (lo dicen los manuales básicos de psicología), aunque estos comportamientos se den con más asiduidad en un determinado prototipo de aficionado. Abandonar el estadio en el minuto80 para no pillar atasco (y sobre todo cuando se va perdiendo) está mal. Pitar al equipo cuando está en una situación difícil y el fútbol no fluye está mal. Exigir la titularidad de ciertos jugadores, independientemente de su rendimiento actual, está mal. Que tenga más ambiente una misa de maitines que un 0-0 en el Bernabéu está mal. Y así podríamos seguir hasta el próximo partido del equipo.
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Ayer ganamos al puto Málaga en el partido de vuelta, ¿y sabéis por qué? Porque somos los mejores. Sí, los blanquiazules son un equipín apañado, que incluso podría llegar a hacernos pupa en una o dos temporadas, pero les dimos lo suyo. Llamadlo oficio, llamadlo la suerte del campeón, llamadlo tener un crack como Benzema, pero ahí estamos, nuevamente en cuartos. Para ser sincero, creo que lo que más se me quedará en la memoria será la surrealista publicidad de La Rosaleda: «Málaga es diputación». O sea, un politicucho se entera de que quieren cargarse las diputaciones, y piensa: «hostia, que me quitan el momio». Y entonces, ni corto ni perezoso, encarga una campaña insitucional con el mensaje de que sin la diputación de los cojones la provincia se hundirá en las profundidades del averno. Un crack, el preboste. Tampoco deja de asombrarme lo feo que es el logo de la puta Unesco, organismo pseudocultural dependiente de la corruptísima ONU. Parece diseñado en 10 minutos con Word.

Del partido en sí guardo un recuerdo ya muy vago, impresiones que se perdiéndose como lágrimas en la lluvia (o argo). Lass por aquí y por allá, para unos cumpliendo, para otros sembrando el caos; Kediro lesionándose; Y Benzema siendo el mejor de nuevo, como seguirá ocurriendo durante toda la década. Me parece también recordar que se sufrió más de lo debido, y unos gritos de maricona de Casillas que no intimidaron ni a los recogepelotas. Pero bueno, ahora mismo todo eso da igual. Lo que cuenta es que ahora estamos en cuartos, y sorprenentemente me encuentro que un buen número de comentaristas de este blog, que acepté heredar para que no se fuera a la mierda, están a-co-jo-na-dos. Esos mismos que decían, sin que se les cayera la cara de vergüenza, que el Madrid trataba de borrarse de la eliminatoria, ahora dicen que la Farsa nos va a follar.

Sinceramente, ya sabía que en la página había más de uno no excesivamente brillante, y también otros que no destacaban por su valentía, pero de ninguna forma me imaginaba que habría por aquí tanto maricón. Especialmente cansinos son algunos como el tiraflechas ése de Colombia, quien a la vuelta de cada esquina ve una fatalidad para el Mandril y un presagio de derrota contra la Farsa. A ver, el Madrit es un club universal y democrático que acoge en su seno incluso a subseres cuyos abuelos iban en taparrabos y se alimentaban de lo que cogián de los árboles. Pero todo tiene un límite: basta ya de tocar los cojones con que vamos a perder con los farsantes. A todos los que piensen así, les digo totamente en serio que en este enlace encontrarán su sitio. Su actitud me disgusta y me repugna, es incompatible con la dignidad del guerrero. Al contrario, casa muchísimo mejor con el espíritu derrotista de los puto colchoneros o de los farsantes de los cojones.

Miren, aquí sabemos todos que los jugadores se cagaron en el último derbi. Que se cometieron errores impropios de un Real Madrid y que nada nos garantiza la victoria. Pero de ahí a decir que no salgan a jugar porque nos faltan uno o dos putos jugadores media un abismo de cobardía que yo, El Mastuerzo, no estoy dispuesto a consentir. Sólo falta decir que tenemos una plantilla corta, coño. Yo pienso que Khedira va a llegar a tiempo, pero si no lo hace jugará en su puesto Pepe, con Varane de central. Y si no, jugará otro: con recursos, imaginación y huevos, como deben hacer todos los equipos, ya sea su presupuesto de 500 millones o de 200.000 euros. Que Capello jugó una final de Champions sin sus dos centrales titulares y se folló a la Farsa 4-0-, hostias ya. La eliminatoria (que es a dos partidos, por si alguno se ha olvidado) no se decidirá porque falte tal o cual jugador, sino principalmente por el planteamiento que haga Mourinho y por la actitud y los cojones que pongan los jugadores. Al fin y al cabo, el Español creo que no tenía ningún nominado al Balón de Oro. Ah, y de paso basta de mitificar a un puto equipo que ha demostrado ser perfectamente batible jugándoles con un mínimo de inteligencia. Lo repito: los derrotistas que se vayan al enlace que les he dicho, o que donen sus huevos a alguna empresa pecuaria. Es obvio que a ellos no les hacen ninguna falta.

– Málaga: 0
– Real Madrid: 1 (Benzecrack)

Incidencias: Arbitraje a lo Mateu de Pérez Lasa. Ojalá cunda el ejemplo.

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…Levántate y anda.

Ser madridista es estar reivindicando constantemente la propia grandeza. Hubo un tiempo en el que Berlusconi -ese personaje-, intentó hacer creer al mundo que su Milan era el club hegemónico mundial, cuando ni siquiera es el que más campeonatos italianos tiene, e incluso en sus tiempos de máximo esplendor, con Sacchi, sólo logró ganar una miserable Liga, ante unos equipos italianos que se sabían todas sus mañas. Ahora hay un equipucho politizado y nauseabundo que quiere venderse como el mejor de la historia, pero que no es más que una moda para listillos e hijos de puta, el ipod del fúpbol: el Farsa, vaya. Y la sacra misión del club blanco, una vez más, es poner en su sitio al impostor.

El pasado Diciembre tuvimos una ocasión pintiparada de hacerlo, pero la desperdiciamos debido a la lamentable falta de carácter que impregna a esta generación. No obstante, el destino, casi siempre generoso, nos concederá una nueva oportunidad en breve, para lo cual únicamente nos pide un requisito: arrasar al Málaga de los petroeuros y el puntaje. El partido de ida dejó bastante claro hasta dónde han avanzado los sureños: se trata de un conjunto ya bastante trabajado, con un centro del campo potente y capaz de un fútbol homologable, pero con carencias innegables en ciertas posiciones, como la delantera; es obvio que los buenos tiempos del gran Van Nistelrooy quedaron atrás. El Madrid tiene tonelaje futbolístico sobrado para ganarles con holgura, y no hay ninguna duda en mi mente (ni en mis huevos) de que así será.

Pero no todos lo ven así. Con gran desmayo, he podido comprobar que alguno que se dice hombre piensa que los jugadores blancos querían evitar la eliminatoria con la Farsa. Les ruego por lo que más quieran que no proyecten sus problemas psicológicos sobre los demás, y nos ahorren la vergüenza ajena. El hecho de que los nuestros no tuvieran la adecuada preparación anímica en el último superderbi no implica que carezcan de orgullo profesional. Tengo clarísimo que para ellos, cuanto antes se enfrenten a la (puta) Farsa, mejor, aunque esta vez deberán demostrar más entereza y pelotas. Que recuerden que no son miembros ordinarios de esta mediocre sociedad, sino madridistas, y por lo tanto espíritus estoicos y superiores.

Tenemos la eliminatoria muy de cara: cualquier empate nos da el pase, aunque sinceramente no creo que se busquen las tablas. Este equipo está diseñado para atacar y, a poder ser, golear (mal que le pese al repulsivo Lama). Una vez, más Mourinho cambia notablemente la convocatoria de un partido a otro, lo que nos obliga a ser un poco videntes e interpretar sus misteriosos designios. El sábado, Arbeloa no iba ni convocado, y hoy el míster anuncia que será titular; quién sabe qué habrá cambiado de un día para otro. Sahin sí que iba convocado contra el Granada -aunque no llegó a jugar-, pero hoy se queda fuera, ahondando la que sin duda es la mayor cuita del madridista actual. ¿Qué pasa con el turco? Si estaba para disputar un partido completo antes de las Navidades, como vimos contra la Deportiva, ¿cómo es que ahora no juega ni un minuto?

Hay posibles explicaciones, pero no muchas: puede que haya vuelto sin forma de las vacaciones, o que a Mourinho no le guste algo del jugador, o que simplemente quiera rotar tanto como pueda a los no titulares. Sin duda la posibilidad más inquietante es la segunda: ¿no entrena con la suficiente intensidad Sahin? ¿Detecta Mourinho una mala actitud? ¿O será que, pese a lo que nos han dicho, no tiene calidad suficiente para ser titular en el Madrid? Me cuesta creer que sea esto último, porque aunque el jugador apuntara a castaña, de ningún modo se le podría descartar hasta haberlo probado en varios partidos. Es muy llamativa la escasa participación del 5, frente a la omnipresencia de Alonso, quien muy raramente abandona el campo, juegue bien, mal o regular. Este tema me tiene en vilo, la verdad.

…Oh! ilustra la batalla mítica entre dos paradigmas (pinchar para ampliar).

La buena noticia es la disponibilidad de Benzema, convertido el baluarte del equipo, y quizá el jugador más en forma de Europa, pese a que algún iluminado que pasa sus días inventándose fichajes en pijama – o igual para escribir necedades hace falta ponerse traje y corbata, quién sabe- se tiró varios meses delirando sobre su  inminente traspaso a cualquier club que nos hiciera el «favor» de cargar con el paquete. Y es que, quién necesitaba a Benzema teniendo la magia de Guti, ¿verdad? Carecer del sentido del ridículo puede ser una ventaja para esto del periodismo. Ah, la hora del partido me parece una puta mierda, pero porque soy un comodón (o «pijamero»): en realidad, los partidos que acaban a medianoche son el futuro y la mejor forma de fomentar el fútbol. Acabando y en resumen: con mantener la tensión competitiva debería valernos para ganar y pasar a la siguiente ronda. Allí nos esperará, de nuevo, la Ballena, que ya ha vivido demasiados años y causado demasiados estragos. Va siendo hora de resolver el asunto de una vez.

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La Polla Virtual estará abierta hasta las 22:00.
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Aunque el mandrilista debe centrarse primariamente en lo suyo, no puede negarse que el empate/victoria logrado ayer por el EspaÑol ante el imperio del mal ha tenido un efecto balsámico.  Bastaba con echar un vistazo a los comentarios del blog líder del momento en las últimas semanas para darse cuenta de que aún había muchas heridas abiertas, cuando no un patente pesimismo entre los más maricas y cenizos. Pero no es lo mismo amanecer a 3 puntos de los malvados que hacerlo a 5, y además sin haber hecho un particular esfuerzo: el Madrid se ha limitado a golear con suficiencia a los rivales, y sobre todo a tener un rendimiento fuera de casa incomparablemente mejor al del mejorequipodelahistoria™.

Examinando el calendario liguero , vemos que no hay un solo escollo de entidad hasta la jornada 31, allá por Abril, con la salida a Pamplona, seguida por la visita del Valencia al Bernabéu. La Farsa, por su parte, en ese mismo período encadena a Osasuna, Valencia y Atlético de la jornada 22 a la 24, con un nulo margen de error y el peligro cierto de descolgarse aún más. Ojo, no estoy pensando en la consecución de la Liga, que veo muy encarrilada; voy más allá: es necesaria una victoria indiscutible en la gran batalla, que es la de la propaganda a nivel mundial. El agit-prop blaugrana permea todos los rincones del globo, embutiendo en su apestosa zamarra los cuerpecitos de millones de incautos niños, cuya imagen es luego difundida masivamente por el departamento publicitario del Reich, ayudado por sus numerosísimas franquicias (entre las cuales están, no lo dudéis, varios medios de la «Central Lechera»).

Esta despiadada ofensiva mediática sólo puede borrarse con una imagen de verdadero impacto, una bomba atómica gráfica que sacuda brutalmente el planeta. Hay tres posibilidades que nos valdrían perfectamente: echarlos de la Champions, ganar la Liga en el Nou Kampf o, más descacharrante aún, que nos hicieran el pasillo de campeones. Pese al favorable calendario, la chapuza de disputar la jornada 20 al final de la Liga hace casi imposible un pasillo, pero sí que podría ganarse el campeonato en la pocilga. Para ello tendríamos que llegar con 10 puntos de ventaja (5 más de los que tenemos ahora) y ganar allí, despejando al mundo cualquier duda sobre qué equipo es el número uno. Y como remate una vuelta de honor, qué cojones.

Claro que eso queda aún un poco lejos, y antes viviremos una inevitable eliminatoria de Copa y quizá también una de Champions. Especialmente importante será la primera: si logramos salir victoriosos, creo que se iniciará una dinámica ganadora ya imparable hasta el final de la campaña. Si bien es cierto que, a mi juicio, los jugadores madridistas aún no tienen un aparato genital completo que los acredite como hombres, sí hay que apreciar la solvencia de un equipo que ya sólo necesita superar este último rito de adultez. Bueno, también podría ser que ambos equipos se repartieran los tres títulos, pero se me hace raro: mi pálpito es que será sólo uno el que se lo lleve todo. Y desde luego, si ganamos el triplete, devolviendo así el equilibrio a la Fuer… digo al mundo, ya podríamos morirnos tranquilos.
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Por Kaillada, escribiendo de madrugada

Después del absurdo e innecesario parón navideño, el cosmos recuperaba su orden lógico con una nueva jornada de Liga. El Granada, modesto visitante, no auguraba una contienda dura y exigente, pero las sensaciones ambivalentes del partido previo ante el Málaga incrementaban las expectativas: todo madridista deseaba comprobar con este partido que, tras el descanso y los polvorones, nuestro equipo mantenía el nivel competitivo que ha demostrado durante todo el campeonato. Como siempre, la alineación merecía el primero de los análisis. Esta vez, creo no equivocarme si afirmo que contentaba al gran público fansista por diversos motivos: la ubicación de Lass en el lateral, la elección de Varane en lugar de Albiol, la titularidad de Khedira y, sobre todo, la posibilidad de ver de inicio a Higuaín y Benzema. Özil en detrimento de Callejón o Kaká me resulta más bien anecdótico en cuestiones de rendimento, a la par que confirma el fetichismo de Mou por el alemán.

Los primeros minutos ya ejemplificaban a la perfección el devenir del resto del encuentro: un Madrid intenso que buscaba presionar muy arriba y dominar la posesión del balón en campo rival y un Granada muy ordenado que colocaba su línea defensiva en la frontal del área propia, ofreciendo los mínimos espacios posibles al ataque blanco. En este escenario, el Madrid se adueñó con facilidad del balón y del encuentro aunque eso no significara fluidez en el ataque y buen juego ofensivo. El equipo pecaba de falta de amplitud, centrando todas las acometidas en espacios interiores y echando de menos las aportaciones de los laterales por sus sendos carriles. Especialmente alarmante fue el rendimiento de Marcelo, sobre todo en la primera mitad, donde ni en cantidad ni en calidad fue capaz de rayar a su nivel habitual.

Con más empuje que calidad el Madrid merodeaba el arco visitante, aunque con demasiada intrascendencia. Entre toda esta falta de claridad, brillaba la luz de nuestro jugador especial: Benzema. El crack francés volvió a dar un recital de juego desde el primer instante y fue, merecidamente, el encargado de perforar el arco rival por primera vez. En uno de los infinitos intentos de penetrar por posiciones centrales, el talento encontró la grieta en el muro táctico granadino: después de una rápida jugada colectiva, Cristiano, ya en el interior del área, elevaba el balón a la espalda de la defensa para el desmarque de ruptura de Özil, que se veía obligado a realizar una acrobacia para tocar de tacón, habilitando a Benzema, quien llegando en carrera marcaba al primer toque. De toda la jugada, no puedo evitar quedarme con la exquisitez táctica de Karim por encima de la técnica de sus compañeros. En lo que parece sólo un gol de oportunista del área, yo veo una interpretación maravillosa del timing y de los espacios de toda la acción.

Pocos minutos después, sólo tres, el Granada conseguía empatar en una jugada que evidenciaba que la pájara postvacacional no estaba del todo superada. A priori, puede parecer una rápida acción que provoca desajustes defensivos difíciles de solventar. No obstante, basta una repetición para constatar el horrendo nivel defensivo desplegado en la misma: Marcelo desbordado con suma facilidad, Lass interpretando mal la marca y, sobre todo, una mala actuación de los medios centros, en especial de Xabi Alonso. Sorprende su pasividad y nefasta lectura: deambula y flota sin aportar nada, ni una cobertura agresiva a Marcelo ni un ajuste en el marcaje ante la salida de zona de Ramos.

El tanto visitante logró atenuar el ímpetu del ataque madridista, que pasó una quincena de minutos de espesor, en los que el Granada definitivamente echó raíces sobre la frontal de su propia área. Fueron, quizás, los peores minutos de juego, en los que se volvió a evidenciar el mal estado de forma de nuestro cerebro: comegulas Alonso. Cuando un jugador depende tanto de una única faceta del juego, la calidad en la creación de juego y, consecuentemente, de su desplazamiento de balón, y no está nada acertado en ella, su rendimiento se convierte, directamente, en paupérrimo. Si, para más inri, es el encargado de ejecutar todas las acciones a balón parado que conllevan centros al área y no consigue colocar una sola en condiciones, su mera participación en el equipo queda en entredicho. Paradojas de la vida, en el primer córner que no lanzó el susodicho, llegó el remate de cabeza que nos devolvió la ventaja en el marcador. Ramos, haciendo gala de una de sus mejores virtudes, conectó un testarazo inapelable que en ese momento viví espontáneamente como un córner kármico después del descalabro de la primera parte contra el Málaga.

Con poco más llegamos al descanso. El Madrid había demostrado un total dominio del balón y del partido, variables que, como ya sabemos, no siempre van unidas. Sin embargo, dos factores no jugaban a nuestro favor: la falta de clarividencia ofensiva y una eventual sensación de fragilidad en el balance defensivo. La segunda parte se presentaba como un nuevo inicio del encuentro: el madridismo necesitaba reconocer la identidad de su equipo. Pero los de Mourinho no dejaron lugar a las dudas: con tan solo un minuto de reanudación, tras una incursión de Marcelo en área rival, otra vez por espacios centrales, el balón llegaba a los pies de Higuaín, que se encargaba de transformar una pelota cualquiera en gol con facilidad pasmosa. Si este gol ya podía anticipar 45 minutos de placidez, tres minutos después llegó la confirmación definitiva: en otra acción espléndida, Benzema lograba un golazo tan sobrio como bellísimo. Realizando una amotiguación con retroceso al alcance de muy pocos, el balón quedaba rendido a sus pies, realizando luego una ligera finta y soltando el latigazo al palo lejano, inalcanzable para el portero. Gesto que recuerda al todopoderoso Ronaldo Luiz Nazário de Lima y que llena de orgullo al madridismo y a todo aficionado a las artes balompédicas.

A partir del 4-1, los cuarenta minutos restantes se convirtieron en una mera anécdota inherente al propio partido. Se sucedieron los cambios de rigor: Callejón por Benzecrack, lesionado de poca importancia. Kaká por Özil, Altintop por Higuaín. Se sucedían intrascendentes fases de ataque de unos y otros. Nos remataban algún que otro balón parado más por alto. Se echaba de menos esa ambición por continuar goleando, más propia de los aficionados que de los equipos vencedores y acomodados en este tipo de partidos. Finalmente, cuando todo parecía abocado al 4-1, Cristiano aprovechaba un balón muerto en la frontal del área granadina para enchufar el quinto del equipo, engrosar sus registros goleadores y regalar una última alegría antes de finiquitar un partido que sólo tuvo 46 minutos de relativa emoción. En conclusión y tirando de pragmatismo, se cubrió con gran éxito otra etapa de esta carrera de larga distancia que es la Liga y que, como bien se anticipaba en la previa al match, ganará el que menos errores cometa. Debemos ser conscientes de que con este nivel de juego nos sobra para ganar al Granada por goleada, pero seguramente no baste para vencer a los rivales contra los que nos jugaremos los títulos.

– Real Mandril: 5 (Benzecrack (2), Ramos, Igualín y Yitán)
– Granada: 1 (Como si importara)

Incidencias: Entrega de una placa al humilde de la mansión de Pozuelo.

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